Problemas dentales ocasionados por los piercings
El piercing es un elemento generalmente cerámico o metálico que se coloca en las mucosas o en la piel mediante una perforación en la zona elegida para que se puedan insertar. Cada día son más las personas que deciden ponerse uno en la cavidad bucal. Nosotros como expertos dentistas en Córdoba capital reconocemos que esta práctica puede traer algunos problemas en la boca que a continuación vamos a detallar.
Consecuencias de llevar piercings en la boca
Los piercings linguales se pueden colocar en cualquier parte de la lengua, aunque lo más habitual es hacerlo en una posición centrada y adelantada. Esta es probablemente la que más problemas ocasiona, ya que se encuentra muy cerca de los dientes. Las principales consecuencias son recesiones gingivales o pérdida de encía y fracturas dentales.
Otro de los piercings son los labiales. Estos se pueden colocar en cualquier parte del labio y el principal problema es la recesión de la encía por rozamiento. Los piercings que se colocan en la piel cerca del mentón también pueden llegar a provocar recesiones gingivales.
Una fractura dental suele tener una sencilla solución, ya que con un poco de composite se puede reconstruir la parte que se haya pedido. En cambio, la recesión de la encía, aunque si es leve puede no acarrear consecuencias, si es importante generalmente suele ir acompañada de una pérdida ósea con la consiguiente también pérdida de sujeción de los dientes. En definitiva, la colocación de este tipo de elementos en esta zona del cuerpo puede provocar daños irreparables.